Dedicatorias
Prólogo
Capítulo uno: Giantville
Capítulo dos: Los sucesos anteriores a los sucesos
2.2
2.3
Capítulo tres: En el otro lado del mundo lejos de Giantville
3.2
3.3
Capítulo cuatro: Los primeros meses en Nueva York
4.2
4.3
Capítulo cinco: En Giantville
Capítulo seis: Los primeros días
Capítulo dos: Los sucesos anteriores a los sucesos
2.1

La chica estaba corriendo por el frondoso bosque de las cercanías de Giantville, con el brazo herido a causa de una gran cortada que estaba chorreando, dejando una huella para su perseguidor que estaba hambrienta de carne humana, ella corría torpemente por el largo pasto de la pradera; manteniendo el miedo de la extraña criatura que en algunos minutos antes la lastimó intentando librarse de la criatura que la tomó del pelo, afixiandola hasta la muerte con un aliento que parecer ser de las cosas más horrorosas que haya presenciado en el cine de terror en las cercanías de la empresa de los Sterling; hasta que tuvo que adentrarse en el espeso bosque que sus arbustos parecen zarzamoras por los atrapantes que podían ahogarte, con el astro plateado iluminando en su mayor resplandor; la pobre joven herida y asustada se escondió en una gran tronco con el brazo herido dijo:

- Ahhh!!! Dios mío - habló asustada - en que cosa me he metido y además que es esa mierda - hablándose a sí misma, con el corazón que estaba a punto de estallar, su respiración entrecortada por la larga huida y la transpiración que corría en el suave y blanco rostro; espero por largos minutos con su inmutable tranquilidad, para la joven fue un tiempo prudente y salió de su escondite, caminaba sigilosamente por un claro que denotaba su sombra y de la criatura que la asechaba muy sutilmente y esta miro hacia atrás sintiendo de la presencia de la criatura, pero no había nada hasta que finalmente se topó con la criatura en frente y este con sus dientes y su saliva que salía de su horrible boca y exclamo:

- Hay por Dios!!! - exclamó aterrada, que comenzó a caminar hacia atrás, hasta que cayó al suelo y la criatura con sus largas garras le corto su arteria yugular, esta instintivamente se tomó el cuello con su mano la sangre manchaba su vestido blanco hasta que su ultimo respiro fue exhalado, la chica quedo con sus ojos abiertos de color negro, su sangre hacia un río alrededor de ella.

A la semana anterior, la familia Sterling esperaba a su hijo problemático, pero a la vez inteligente; el joven Alexander se graduó el lunes de la escuela de negocios en la universidad de Harvard con una alta calificación, de hecho el mejor de su generación al joven de sólo veinticinco años le han ofrecido puestos de trabajo en las mayores empresas de Estados Unidos, en Diciembre del año 2019, llego a su casa y lo estaban esperando toda la familia en una fiesta de bienvenida y en la previa de la cena de bienvenida su madre estaba preparando como buena anfitriona para su amado hijo :

- Esposo mío - gritó Simone a su esposo

- ¿Qué quieres mujer? - respondió el hombre un poco alterado

-     Puedes traer las cosas que están en la cocina, para la bienvenida de Alex - exclamo la mujer muy feliz

- Para que.... - reprochó el hombre, desde el pasillo

- Ahhh!!! .... Querido tu hijo pródigo se graduó de negocios - exclamo Simone, un poco atareada

- Gran cosa.... - reprochó el hombre

- ¿Todavía estás enojado con él? - pregunto Simone

- Y todavía lo preguntas mujer - inquirió el hombre alterado - ese chico siempre nos mete en problemas

- No seas tan duro con él - reprochó Simone

- ¿Por qué lo dices mujer?- preguntó curioso el hombre, llegando a la cocina

- Yo creo que nosotros tenemos un grado de culpa... - con su voz fragmentada se tocó con la mano su rostro

- ¿Culpa de qué? - preguntó el hombre

- Por la muerte de Adrián... por no saber llevar de mejor manera y tú sabes que tanto Beni y Alex eran muy unidos hasta inseparables - soltó unas lágrimas Simone

- Mujer tranquilízate - se acercó a calmar a su mujer

- ¿Cómo me pides eso, acaso no te duele? - preguntó entre lagrimas

- Tú crees que eres la única yo llevo mi propia pena... - dijo el hombre con mucha calma

- Pero... - se secó las lágrimas con su chaleco

- Querida haz lo que tienes que hacer, y yo voy a hablar con Benito - apeló el hombre tranquilo

- ¿Vas a hablar con Benito? - preguntó curiosa Simone

- Si claro tiene que salir de su habitación para recibir a su hermano - inquirió el hombre

- Eso sería genial - exclamó Simone - pero... ¿Cómo lo vas a convencer?

- Tengo mis métodos - le sonrió - tú preocúpate de la cena y yo de Benito

-   Está bien anda - sonrió Simone consolada, y el padre se retiró de la cocina para dirigirse a la habitación del joven, mientras tanto ella siguió con los preparativos para la cena de esta noche con los detalles; el padre llego a la habitación con el joven Sterling estaba un poco incómodo y a su vez tranquilo espero uno minutos para tomar un poco de aire hasta que finalmente golpeo la puerta suavemente llamando amablemente:

- Benito ¿Estás ahí?- preguntó dulcemente, sin recibir respuesta alguna en la habitación, espero tranquilamente unos minutos hasta que se emano una voz en la habitación, esto coloco en estado de alerta al padre y la voz dijo :

- Siii essstooyy aaaquíí - tartamudeo el joven

- ¿Hijo puedo pasar? - preguntó amablemente el padre

- Claaaroo - respondió el joven tranquilo a través de la puerta este entra sutilmente a una oscura habitación que tenía un olor a moho, ningún rayo del sol estaba en esa habitación y la brisa no entraba, era un lugar impenetrable hasta para ellos mismos; el padre se acercó a las grandes ventanas, levantó las persianas americanas y la luz por primera vez entraba en esa habitación; a su vez también abrió las ventanas para que pudiera entrar la brisa del día, estaba ahí un chico de veinticuatro años sentado en un escritorio paralizado por el miedo, de ojos azules que reflejaban la esencia del océano, y de mirar perdida en el tiempo, con una melena clara con sus rizos desordenados y largos, de piel pálida y delicada, con un rostro muy dulce en conjunto de esos pálidos y rosados labios, con hombros anchos, fuertes y a su vez de espíritu dulce; hasta su padre se sorprendió no podía entender que algún ser humano sea tan grande como Benito, con su gran altura metro noventa, con un cuerpo atlético y vigoroso, con un atractivo poco común, a su vez sea tan frágil con esos ojos dulces y de espíritu dulce; este último se levanta violentamente y se dirige a su padre en un tipo de aplanadora y le dice:

- ¿qqquéée haaaceesss?- intentando de articular las palabras

- Solamente hago que entre viento y luz - exclamó el padre

- Nnnoo teee diijee qquuee looo hiicciiieraasss - un poco enojado

- Bueno hijo, yo vine porque va a llegar tu hermano - explicó el padre un poco nervioso de la altura de su hijo

- Vaaa aaa veeniirrr AAleexx, ess eennssserriioo - exclamó sorprendido Benito

- Si hijo Alex va a venir a administrar la empresa familiar por eso va a volver - explicó el padre para que Benito entendiera las intenciones de la llegada de Alexander

- Eesoo esstáá biieenn paadrree, ¿¿ciierrtoo?? - exclamó Benito

- Si hijo - tocándole el hombro con ternura

- ¿qquéé haay quee haceer paadree? - preguntó Benito preocupado

- Solamente bañarte y vestirte apropiadamente para la ocasión,- ¿Entendido? hijo - preguntó el padre

- Esstáá biieenn paadrree vooyy a haaceerloo innmmeediiataameenntee - inquirió Benito, estaba buscando la ropa

- Hijo - exclama el padre

- ¿quuééé? - preguntó Benito a punto de entrar al baño

- Te quiero mucho - dice un padre emocionado, este lo estrecho a su cuerpo con un fuerte abrazo

- Esstáá biieenn - tartamudeo el joven alejándose para ir a ducharse, el padre salió de la habitación y bajo con mucha tranquilamente para dirigirse a su estudio, para revisar los estados financieros de la empresa Sterling S.A.
Paso toda la tarde con la eminente tranquilidad, dentro de Giantville con el sol en su punto más culmine del día, con una brisa caliente, este cedía lentamente para dar paso a la oscura y misteriosa noche, a las 19:30 de la tarde llegó Alexander Sterling con su novia Vanessa a las puertas de su gran mansión después que lo dejó el taxi, ahí lo esperaban esperando el mayordomo en la puerta, era un hombre de avanzada edad con su pelo todo canoso; con una peculiar vitalidad que es admirable hasta para el mismo Alexander y curioso, este invitó con la mano a que pudieran pasar y estos últimos pasaron tranquilamente, y cuando Alexander se sorprendió que la mansión estuviera igual como lo recordaba, en realidad desde su tierna infancia cuando todavía Adrián estaba vivo jugaba junto con Benito a pesar de la enfermedad de él, corrió unas leves lágrimas en el suave rostro de Alexander al recordar a Adrián, todavía tenía la imagen del accidente clavada en su mente y todas las primeras noches que soñaba con el hecho, y Benito gritaba todas las noches con un grito ahogado y él tenia que consolarlo, dormir con él para resguardar los sueños de él y los suyos también, finalmente llegó a la entrada de la puerta titubeo un rato hasta que tuvo el valor de golpear; espero unos segundos y abrió la puerta, una mujer desconocida para él y le preguntó amablemente:

- Hola Buenas Noches!!! - expresó Alexander amablemente

- Hola - sonrió - ¿A quién busca?

- A mi madre - respondió alegremente Alexander, en ese momento aparece Simone Sterling;una mujer de cincuenta y cuatro años que aparenta, unos cuarenta con su pelo corto, pero rizado igual a Benito, con esos ojos azules parecidos a los de Benito, su piel ligeramente arrugada y pálida, de estatura respetable, con una caminata elegante y llena de gracia, en ese momento extendió dulcemente a su hijo y dijo:

- Hijo mío - abrazó a Alexander

- Madre - la beso en la frente

- ¿Cómo llegaste del viaje? - preguntó a Alexander preocupada

- Un poco cansado - respondió Alexander

- Mi niño precioso - abrazó de nuevo a su hijo, sin percatarse de Vanessa hasta que la vio de repente y preguntó - ¿Y quién es esta jovencita? - preguntó con una sonrisa

- Hola - respondió la joven con una ligera sonrisa

- Madre ella es Vanessa, mi novia- respondió Alexander tomándole la mano

- Un placer jovencita- la saludo con un beso en la mejilla

- Igualmente- respondió el saludo amablemente

- Pasen chicos - invitó Simone Sterling, para que puedan pasar por el living y estos dejaron el equipaje en la entrada en donde el mayordomo los sacó inmediatamente, y los tres tomaron asiento en los sillones que eran antiguos de los 80', pero por lo general era un poco opaco y oscuro que daba un poco de temor; Alexander admite que la casa le genera un despertar de lo que estaba dormido, sus recuerdos de su infancia en conjunto con sus hermanos y su madre le pregunta:

- ¿Se van a casar? - preguntó sin tapujos

- Madre!!!, Esas cosas no se preguntan - respondió incómodo Alexander

- Pero mi amor es sólo una pregunta - inquirio Vanessa un poco enojada

- Me gustaría que mi Alex sentará cabeza una vez por todas - habló Simone Sterling con cierta esperanza

- Madre somos novios, eso se verá en el futuro - respondió Alex un poco incómodo, en ese instante llega de manera sutil un joven de cabellera rizada, de gran altura, con hombros anchos y con esos ojos característicos parecido al de su madre, pero éstos son más inocentes y puros; en primera instancia Vanessa se dio cuenta del pobre chico y esta se percató de su extraño comportamiento avisando a Alex que estaba hablando con su madre muy animado y este se dio cuenta de Benito y exclamó:

- Beni!!! - exclamó Alexander con cierta emoción

- Benito - inquirió su madre, en ese momento se levantó y se aproximó para abrazar a su hermano menor

- Hermanito - abrazo Alexander con mucha emoción a Benito

- Hoolaaa heermaanoo - respondió Benito intentando de responder y estos se separaron para ver el rostro de su hermano menor

- ¿Cómo estás Beni? - preguntó Alexander

- Biieenn - tartamudeo Benito tocándose el cabello

- Que bueno hermanito - exclamó alegre Alexander - pero éstas muy guapo este chico, madre - se dirige a su madre con una sonrisa en el rostro

- Si Beni se ha convertido en un bello jovencito - inquirió a su madre

- ¿Vamos a sentarnos hermanito? - preguntó Alexander

- Si, pero ¿Quién es ella? - le preguntó Benito apuntando Vanessa y mirando a su hermano
- Benito ella es mi novia - respondió Alexander

- ¿Qqquué esss esssooo? - preguntó con cierta ingenuidad
- Después te explico cuando vaya a tu habitación en la noche - respondió Alex a su hermano- ¿Está bien?

- Siii heerrmaanoo - respondió Benito

- Buen chico - exclamó Alex tomándole su cabellera rizada - sentemos mejor

- Yyyaaa - respondió Benito, Alex llevaba a su hermano menor al sillón en donde estaban todos, pero este tomó una distancia discreta con respecto a Vanessa ya que él no la conocía, pero la joven no se preocupo mucho por eso; en cambio vio a un joven muy atractivo como hombre con esos brillantes y bellos ojos azules y esa melena clara y rizada, daba un cierto aire de inocencia y que este miraba fijamente a su madre, mientras ellos charlaban tranquilamente en la espera de la cena que todavía no estaba lista; y después de unos minutos la joven sirvienta exclamó:

- La cena esta lista - exclamó la joven

- Gracias linda, te puedes retirar - respondió Simone amable - vamos chicos a la mesa - invitando a los chicos a pasar a la mesa que estaba bien decorada, demasiado elegante para la ocasión y Alex le dice:

- Todavía sigues siendo buena anfitriona - admitió Alex

- Claro jamás hay que perder la clase hijo mío - inquirio la madre en ese momento llama con la mano a la sirvienta - llama al señor

- Claro señora - asintió la joven- voy inmediatamente - la joven se retira, mientras ellos tomaban asiento en sus respectivos lugares, Benito se sentó al lado de su hermano Alex en el lado derecho de la mesa; y en tanto en el lado izquierdo Simone y Vanessa toman asiento, la última quedó en frente de Benito y pudo mirarlo más de cerca, se sorprendió porque el joven no es solo más atractivo de lo que ella creía; sino que era de cuerpo grande apoyado con su estatura que le daban cierta estética a esa anatomía majestuosa, Vanessa lo mira demasiado que Alex se percató de la situación y miro disimuladamente a su hermano ; viendo que Benito no se dio cuenta, decidió no decir nada en la mesa para no arruinar la ocasión. En ese momento llegó el patriarca de la familia Sterling con su majestuosa actitud, que no paso nada de percibido en donde los demás se quedaron callados y se levantaron involuntariamente, este con la mano indico que se podían sentar y los demás obedecieron, entró el mayordomo con las sirvientas con los platos de entrada que era unas verduras algo muy ligero, mientras el mayordomo servía un vino tinto a todos excepto a Benito; para él había un jugo de limón con menta muy rico, estos se retiraron a buscar el plato de fondo y la familia comía en silencio; mirándose uno al otro hasta que Simone Sterling habló:

- Querido esposo - exclamó Simone mirando a su amado mientras comía la ensalada y le tomó su mano izquierda

- ¿Qué pasa amada mía? - preguntó León tomando su mano para besarla con ternura

- Hay que comprar algunas cosas que faltan- inquirio Simone

- Bueno mi amor - la miró dulcemente y de repente vio sentado al lado a Alex y a Benito, se dirige a Alex de forma autoritaria

- Mañana te quiero en mi oficina a las nueve de la mañana - dijo el padre con cierta autoridad

- Si ¿Para que?- preguntó Alex curioso

- Para cosas de trabajo que no vamos a hablar en la mesa es de pésima educación- inquirio el padre

- Está bien - respondió Alexander, mientras el padre se dirige a Benito de forma suave

- Benito - llama a su hijo menor

- Ssiii paadrree - estaba un poco asustado Benito

- Querido ¿Cómo está la cena ?- preguntó el padre

- Esssttaa muuyy buueennaa laaa ceenna - respondió Benito

- Que bueno - con una leve sonrisa

- Peerroo loo meejoor ess quuee essstaaa mii heermaanoo Aaaleexx - inquirio Benito con una sonrisa sincera

- Me alegra que estés feliz hijo - respondió su padre con una ligera sonrisa y su mirada se dirigió a su amada esposa que estaba más bella a pesar de la edad, miró más allá y vio a la joven que no dejaba de ver a Benito, este tocio un poco y capto la atención de la joven y le pregunta:

- ¿Quién es esta joven? - preguntó curioso León Sterling

- Padre ella es Vanessa mi novia- respondió Alex con cierta incomodidad

- Ahh enserio - inquirio el padre y se dirige a su esposa- ¿Eso es cierto?

- Si mi amor - afirmó Simone

- Gracias a Dios escucho mis plegarias - levantó las manos al cielo

- ¿Por qué eso?- preguntó Alex un poco irritado

- Por fin vas a sentar cabeza - exclamó el padre

- ¿Qué? - preguntó Alex

- ¿Cuando se van a casar? - preguntó curioso el padre

- Ehhh - tocio un poco Alex, con cierta incomodidad - somos novios

- ¿Qué es eso ? - preguntó más curioso

- Tenemos una relación, pero todavía no hay planes de matrimonio- intentó de explicar el joven, mientras sacaban el plato de entrada y servían el plato de fondo que era algo exquisito y se volvieron a retirar

- En mis tiempos... - exclamó su padre

- Bueno en sus tiempos no son los mismos que los míos eso es en los 80' padre - habló Alex con cierta irritación

- Ahh Dios, no entiendo nada - se dirige a su mujer

- Tranquilo mi amor para que no te falte el aire - expresó Simone con cierta preocupación por su salud

- Paadree ¿Qqquuué siigniifiicaa eesoo? - preguntó Benito que sorprendió su intervención a todos

- Querido eso después te lo explica mejor tu hermano Alex, ¿Está bien, hijo? - exclamó el padre un poco incómodo

- Buueenoo paaadreee - inquirio Benito, hubo un tiempo de silencio para poder disfrutar en tranquilidad su cena y todos se miraban mutuamente hasta que terminaron el plato de fondo que además estaba exquisito y justo en ese momento llega el mayordomo y dice:

- El postre esta listo para ser servido - anuncio el mayordomo haciendo un gesto con la mano las sirvientas se llevaron los platos y trajeron los postres que es especialidad de Simone y fue preparada por ella , de su tierra natal Francia; todos comieron el postre con mucha calma y Alexander dijo:

- Madre esto esta exquisito como siempre - exclamó mientras comía el postre

- Gracias hijo, es de mi tierra natal Francia - inquirió la madre con una sonrisa en su rostro

- Señora esto está muy bueno - inquirio Vanessa con entusiasmo
- Querida no es de nada - miro a Vanessa con alegría, después de unos minutos el patriarca se levanta y exclama:

- Me voy a dormir, buenas noches a todos - exclamó el hombre

- Buenas noches - exclamó Simone y los otros se despidieron en distintos minutos

- Ya madre tengo que levantarme temprano para ir a la empresa - exclamó Alex un poco agotado

- Maaadrree vooyy aaa eesstaaar ccconnn mmmiii heermaaanooo - tartamudeo Benito se levantó de la mesa y salio caminando rápidamente a su hermano siguiéndole de paso - heeermaanoo Aaleexx - tartamudeo Benito y su hermano se volteó, se acercó y le sonrió con sinceridad

- ¿Qué ocurre hermanito? - le sonrió sinceramente

- Mee vaasss aa exxplliicaarr, essoo deee seerr nooviioss - tartamudeo muy nervioso
- Bueno vamos a la habitación - exclamó Alexander tomándolo del hombro para conducirlo a la habitación, y al entrar estaba un poco cambiado llenos de rompecabezas, un poco desordenada; eso era normal, intentaba de recordar los primeros días de la muerte de Adrian cuando Benito lloraba mucho, le leía cuentos antes de dormir y dormían juntos, el joven se desvistio delante de Alexander, el mismo se sorprendió nunca lo vio desnudo, era ya un hombre muy atractivo con un hermoso cuerpo, que nunca se dio cuenta de lo armonioso y bello que era, pero en realidad es un niño vulnerable e inocente la dulzura de su personalidad, con un corazón que quita lo miseria que significa vivir en esta mansión, Benito le hablaba y este no lo oida hasta que alzó un poco la voz:

- Aaleexx - alzó un poco la voz Benito

- ¿Qué pasa hermanito? - le sonrió y se sentó al lado de él en la cama para tocarle la suave y rizada cabellera

- Teee exxxtraaññaaabaa heerrmaanoo - lo miraba fijamente con esos ojos azules muy hermosos

- Yo igual te extrañaba hermanito - con cierta emoción que se le caía unas lágrimas

- ¿Pooorr quuéé llooraass?- preguntó curioso Benito

- No es nada - se secó las lágrimas
- Buueenoo ¿Quuéé eess seerr nooviiooss? - preguntó Benito con curiosidad

- Bueno.... es cuando tu le entregas parte de ti a alguien más - exclamó Alexander un poco incómodo

- ¿Cóómooo enntreegaar aalgoo dee tii?- preguntó Benito

- Es que conoce todo de ti, desde gustos, tus colores favoritos y comparte todo tus dolores y sueños - explicó de manera simple a su hermano

- Heermaanoo ¿Quuéé esss esstaar enaamooraadoo? - preguntó Benito

- Es cuando.. la miras a los ojos y quieres verla siempre esos hermosos ojos, al despertar quieres verla, sentirla y tocar a cada fibra de su cuerpo y su alma, compartes todo lo tuyo parte de tu vida, tus secretos, tus sentimientos, el amor es mas que físico es una conexión espiritual - explicó Alexander

- ¿Vooyy aa seentiirloo aalgúúnn dííaaaa? - preguntó Benito un poco apenado y Alexander se dio cuenta de su expresión no sabia que decir y finalmente dijo:

- Pues claro hermanito - lo mira con esos ojos verdes con algunas matices de color cafe y celeste que se notaban más a la luz

- ¿¿Peerooo laa aaammaass aa eellaaa? - preguntó Benito

- Ehhhh!!! - intentando de responder la pregunta, es que nunca le habían preguntado por los sentimientos que tenia hacia Vanessa, miraba a los ojos a su hermano como si hubiera leído su alma; Alex en el fondo sentía que Benito sabía todo lo que le rodea quedó impresionado ante la pregunta - bueno Benito me tengo que ir a acostar

- Cllaaarooo Aaleexx - exclamó Benito

- Buenas noches hermanito - besó la frente del muchacho

- Buueenasss - inquirió Benito, se acurruco entre sus mantas la ultima imagen del día fue la angelical e inocente rostro de Benito que inspiraba a sentir los sentimientos más puros del ser humano; para Alex su hermano representa la inocencia de la humanidad, que no ves en todos lados; ni mucho menos a las personas que estan envueltas de máscaras que aparentan ser algo, y a su vez no somos nada nos sentimos vacíos; apago la luz y cerró la puerta con un extraño cansancio que caminó torpemente a la habitación, abrió la puerta y vio a su novia Vanessa viendo la fotografía de él y sus hermanos cuando él tenía diez años su hermano Benito nueve y Adrian quince años y ella se da vuelta y le sonríe:

- Mi amor - se acerca y le besa sus labios

- ¿Qué sucede? - preguntó Alex curioso

- Nada, me gustaría saber ¿Quién es el joven que te acompaña a ti y a tu hermano? - preguntó Vanessa con una odiosa curiosidad

- Es mi hermano Adrian - habló Alexander un poco molesto

- ¿Y dónde está? que no lo vi hoy en la mesa - preguntó Vanessa un poco invasiva

- Él está muerto - alzó la voz con un poco de rabia - por eso no estaba en la mesa

- Ahhh Dios perdóname mi amor no lo sabía - le tocó el hombro

- Pero como lo ibas a saber - inquirió con rabia

- No te enojes mi amor - exclamó con cierta culpa por la pregunta - vamos a acostarnos - lo tomó de las manos para que se fueran a acostar y este finalmente accedió, apagó la luz y su novia lo abrazo quedándose rápidamente dormida, mientras él pensaba en lo que paso en el día y se quedó dormido sin darse cuenta.

Mientras que todos dormían plácidamente, Alexander tenía un continuidad de sueño de los más extraños del mundo; todavía recuerda cuando vio morir a su hermano mayor que lo arrolló ese auto de color rojo que salio corriendo inmediatamente, después del accidente; corrió hacia su hermano y Benito lo seguía detrás de él tuvo su cabeza, nunca olvidará eso ojos de color miel que lo miraban fijamente, él lloraba gritando desesperadamente pidiendo ayuda, junto a su hermano; la gente del pueblo se acercaba de curiosidad y llamaron a la policía hasta que después de unos minutos el sintió su último suspiro de vida, Alexander lo vio morir en la calle y Benito lloraba en silencio, mientras la gente le daba los primeros auxilios para que pudiera volver a la vida y fueron inútiles, Alexander abrazo a su hermano Benito con todas sus fuerzas y lloraron, mientras la gente lloraba y se sentían impotentes ante esta situación; le tuvieron que avisar a sus padres y estos lloraron, su madre gritó y su padre lloraba en silencio, tuvieron que ir a la morgue; en donde vio a su hermano por última vez y ahí entendió que jamás volverá, ese 15 de mayo del año 2005 no volverá a ser lo mismo, ese día estaba nublado y fue enterrado junto con sus ancestros desde la fundación de la ciudad, en ese momento despertó con sus manos temblando y eran las ocho de la mañana, se levantó y vio a su novia acostada en su cama se ducho; y se colocó su ropa de oficina, se peino su cabellera y bajo a tomar desayuno, en el comedor estaba sus padres y su padre lo vio y dijo:

- Yo pensaba que no ibas a despertar - exclamó el padre

- Si desperté al fin - replicó Alexander

- Hijo toma desayuno - le dice su madre

- No madre, no te preocupes - inquirió Alexander

- Hijo estás muy delgado - con tono de preocupada

- No tranquila - la beso en la frente - me tengo que ir a la oficina

- Espero que te vaya bien en tu día hijito - le beso la frente a su hijo

- Claro - replicó Alexander retirandose de la mansión estaba ahí estacionado su auto, se retiró de la mansión para ver la ciudad, para su parecer no ha cambiado mucho; está más moderno que los años anteriores sus calles son más transitables, la gente por lo menos no ha cambiado sigue igual de supersticiosas, él en la infancia escuchó de los rumores de la maldición que sufre la familia Sterling desde la fundación de Giantville; no sabia con exactitud, pero las historias tenían cierta lógica; su abuelo se suicidó colgado en un árbol por su estado de locura, también se enteró que Celeste Sterling murió en manos de su marido en estado de ebriedad, antes de ser colgada fue torturada por un método japonés que conocía su marido, cuando fue de viaje por el mundo oriental; no era secreto del pueblo en ese minuto casi al final del siglo XIX que un tiempo Celeste estaba embarazada y a causa de los maltratos de su marido lo perdió, es algo muy trágico, en sus años de investigación supo eso por parte de su familia y árbol genealógico, aunque sus padres piensan que no existe tal maldición que el pueblo habla; Alexander llegó a la conclusión que cree que existe esa maldición por los distintas cadena de desaciertos a lo largo de la historia de la familia Sterling, eso no es para ignorarlo era tan evidente como no se puede tapar el sol con un dedo, las evidencias son tan contundente y que tienen mucha fuerza, pero la pregunta que siempre va a estar rondando en la inquieta y suspicaz mente de Alexander ¿Por qué? ,¿Cuándo adquirimos esta maldición? , pero a su vez se preguntaba ¿Cómo?.

© Sara. J González,
книга «Las Crónicas de Melek Hoffmann III: Misterio en Giantville».
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