Decirto dorado.
La historia que alguna vez fue.
Luces danzantes.
Dorado colgelado...
Luces danzantes.
    Una especie de rugido similar al viento se oyo por todo el decierto,alzando a una criatura parecida a el Kaito de hace rato,la diferiencia era que esta se arrastraba por debajo de la arena. No era agresiva,mas bien,era protectiva con sus crias que seguian su paso entre las ruinas de esa gran nacion caida. El cielo nocturno  se iluminaba por el destellar blanco de la montaña nevada y las estrellas azules y blancas,pese hacer de noche se podia ver casi sin problema alguno. Habian espejismos de una ciudad bañada en plata mientras lentamente se hacercaba una enorme maquinaria que lanzaba proyectines por su cañon,rompia edificios y carreteras sin dificultad alguna.
Una campanada sono despertando al niño peliblanco,quien abria los ojos lentamente,solo para darse cuenta que estaba distante de la estatua en donde se recargo para dormir. Volteo a otra direccion notando que estaba cerca del exterior nocturno,los plateados rayos de la luna hacian sombras muy oscuras en la noche.
Camino con paso normal mientras que se terminaba de despertar del todo,tallo sus ojos soltando un vostezo que sono como una nota peli aguda. Segundos despues se oyo un canto de las notas mas aguda que conformaba una melodia relajante y magica. Parecia venir de una parte alta,quizas un puente de piedra,pero creyo que podia estar en una casa de alredor,y guiado por la melodia camino hasta el exterior.
Paso por debajo de un puente de piedra formado naturalmente en donde algo cayo detras de el,justo al mismo tiempo sus prendas se bañaron en dorado. Al dar la vuenta se encontro con una niña de mas o menos su misma edad,quien tenia la cabeza tapada y solo se podia ver sus verdosos ojos,las prendas de esa niña eran de color plateado con un lijero azulado. La luna alimentaba el alma y regeneraba su poder mientras se mantuvieran debajo de la luz lunar.
Aquella niña miro a nuestro niño con curiosidad,lo rodeo unas cuantas veces apreciando su plateado cabello y su dorados tallados. Se detuvo delante del niño y extendio su mano para acariciar su cabello,el cual era muy suave,tenia una sonrisa en el rostro cuando jugaba con el cabello de aquel niño. Este se molesto levemente,aparto la mano de la niña y se acomodo el cabello. Se miraron por un tiempo antes de que la niña notara la larga bufanda del niño,dicha bufanda tenia tallados de algunos signos de la lengua desconocida,pero se podia entender una sola palabra en ello.
La niña tomo la parte mas larga de la bufanda sentandose en la arena para inspeccionar mas afondo aquellos tallados,pero no logro desifrar mas que el nombre de la alma de aquel niño "Akalia". La niña de un salto se levanto de la arena alzando los brazos para expresar la felicidad que sentia con extrañitud,regreso la vista hacia el Akalia,quien estaba disgustado por la niña y su actitud tan infantil.
Akalia volteo a ver a la montaña nevada esperando poder llegar a su destino,con su prometida,pero el sabia que sin importar el costo lograria llegar hasta aquel castillo que unicamente es visible para los "Artistas". La niña miro hacia la misma direccion que Akalia,sonrio dando un salto largo para usar su alma para elevarse con su plateado,aleteando con su cqpa como si fuese un buho en caseria. Con una nota aguda le indico que le siguera,Akalia le respondio con una nota media.
La niña se empezo a mover aletiando como un buho mientras era perseguida por Akalia quien esquiava con su tabla sobre la arena oscuresida,usaba su dorado para tomar mas velocidad. La noche se iluminaba con unas auroeas de colores del arco-iris,un arco-iris nocturno,mientras dos estelas direfentes maecaban su trayectoria en el suelo y el aire. La bufanda de Akalia revolotiava hacia atras extendiendo su cuerpo de hilos al maximo,era como una bandera que se movia sutilmente en el aire frio.
Ambos niños cantaban alegremente una melodia emltiva que reflejaba la ecena pasifica de ese momento,Akilia pronunciaba las notas menos agudas mientras la niña decia las notas mas agudas. Akalia giro lijeramente esquivando una roca que esta delante suyo,la niña subia por encima de los ñuentes dejandose caer de enpicada contra la arena,dos segundos antes de chocar con la misma usaba su alma para elevarse a una altura considerable. Le parecia curioso que alguien con el poder de la alma no volara como ella,asi que intento esquiar sobre la arena. Bajo lentamente hacia la arena con los pies en posicion para esquiar,pero tropeso con la arena y rodo un par de metros en la arena antes de detenerse.
Se sento en la arena frustrada por no haberlo conseguido a la primera,inflo sus mejillas conteniendo su grito melodico. Akalia freno al lado de la niña notando su frustracion,pe so que seria bueno ayudarle asi que la puso de pie y le presto su tabla de esqui. Luego de varios intentos la niña aprendio por fin,estaba alegre por sentir el viento en su rostro que emñujo su horro hacia atras revelando su celeste cabello,era seguida por Akalia quien se deslizaba usando sus pies. Salto al ire y comenzo a volar sin perder de vista a la niña,la cual se deslizaba de un lado al ltro esquivvando los obstaculos.
Akalia volaba por el aire manteniendose a una altura de 5 metros de alto,se movia de un lado al otro usando lo largo de su capa como alas de un ave dorada. Un tiempo despues ambos niños volvieron a lo de antes,Akalia esquiava y la niña volaba. Llegaron a una parte en donde el terreno se volvia plano,cuando Akalia llego a ese terreno empezo a perder velocidad de apoco hasta que se quedo quieto sobre la tabla. La guardo antes de que la niña.callera de pie a un lado de el.
Delante de ambos habia una iglesia abandonada,culla madera estaba siendo consumida por el tiempo y las termitas,la madera putrefacta crujia con el viento lijero de la noche. La campana estaba oxidada por la humedad a la que se habia expuesto,pese que aqui no llovia,alser metal servia como un espejo en donde la brisa del viento pegaba sus diminutas gotas de agua. Sus puertas estaban abiertas a la mitad,en la pequeña grieta de ambas se podia observar como una luz salia al exterior iluminando a no mas de las escaleras que tenia.
Se voltearon a ver por un instante antes de que la niña alzara su mano izquierda,la agito de un lado al otro despidiendose de Akalia,quien le respondio con el mismo jesto antes de seguir con su camino. La niña camino hasta la puerta entrando al interior de aquella iglesia para cerra las puertas tras ella y perderse ante la vista de Akalia,quien la habia seguido observando.
Akalia camino por el arenoso decierto,enterrando sus pies hasta los tobillos en la arena,caminaba casi como si estuviera en la nieve. De pronto la profundidad de la arena empezo a desender hasta revelar un suelo pavimentado que estaba agrietado,algunas hiervas salian por las grietas acompañada de algunas flores blancas que media unos 6 centimetros de alto. Aquella carretera estaba tapada por algunas partes de hiervas altas que llegaban hasta la ciltura.
Akalia camino por aquel camino hasta entrar a una zona rulan que estaba oculta con las sombras de los altos edificios. Parecia estar colgelada en el tiempo ya que se podia ver a personas que se convirtieron en estatuas de arena,algunas fueron convertidas cuando corrian,se escondian,miraban el cielo o abrazaban a sus hijos. Parecial ser muy fragiles,hasta con el toque de una hoja se podria derrumbar en granitos.
La celle estaba repreta de esas estatuas y era imposible pasar por en medio de tanta multitud sin destruir una que otra estatua. Asi que Akalia obto por otra opcion,pasariavolando por encima de todos ellos,y asi fue. Era como un angel de oro volando por encima de la ciudad,cullas calles estaban llenas de mas estatuas,hasta habian detro de los edificios y algunas que estuvieron apunto de lanzarse por las orillas de los edificios.
Mas adelante,y casi en el centro,estaba una torre de reloj,cullas manesillas se detenian alas 7:59,pero no se sabia si era de la noche o del dia. En el tejado de aquella torre Akalia  se poso ante la ciudad,buscando la direccion de aquella montaña nevada. No estaba muy lejos de ella,posiblemente mañana llegaria sin mas rodeos,pero no sabia que obstaculo se le pondria en frente.
Una estrella violeta surjo los cielos pasando por encima de aquella ciudad,—¿Sera otro artista? ¿O un caza melodias?—Se pregunto asi mismo con un dedo en la barbilla. Aquella luz violeta se perdio en el horizonte del cielo nocturno dejando en duda a nuestro niño. Siguio con su camino hasta aterrizar sobre una maquina como la que se encontro la otra vez,pero esta estaba en perfectas condiciones,ademas que se habia convertido en un bloque de piedra gigante.
Akalia penso —Bueno,puede que sea como el Kaito que me ataco. Sera mejor dejarlo como esta—. Bajo de aquella maquinaria notando que un liquido negro se habia pegado a sus pies,olia fuerte y parecia haberse derramado de aquella maquina. Con su alma se imñulso hacia el cielo para seguir volando.
Realmente no habia mucho que destacar,solo un ave metalica gigantesca que se entero por las lineas del metro que alzaba partes de la carretera y destruia varios edificios con sus alas extendidas,una especie de serpiente metalica que atravezaba un edificio de lado a lado,y cosas como esa. Pero la mayoria de las estatuas volteavan a ver hacia la direccion en donde Akalia aterrizo por primera vez,como si todo hubiera pasado al mismo tiempo.
Regreso a los prados del decierto,la arena estaba menos caliente que antes,y eso que era de noche. En el dia la arena ardia como si te bañaras como agua,en la noche es ta tibia pero ahora se volvio mas fria,como cuando te echas un cubo pequeño de hielo en la boca. Akalia observo la montaña,cada vez estaba mas cerca y se podia sentir su helado viento. Parece que la luz blanca esta brillando con mas intensidad que antes,su blanco color se volvio uno plateado semi azulado con un celesto fosforecente,la cual llamaba con ansiedad y desesperacion a Akalia. Otro viento sopro para susurrare algo al oido; "Puedes quedarte aqui... O continuar adelante y enfrentar tus miedos"
Akalia se estremecio al oir eso,su piel se erizo de tal forma que su cabello blanco se alzo hacia arriba para despues volverse a acomodar. Se quedo pensando durante algunos segundos en la decision que tomaria,pero ambas eran injustas. Pese a que este mundo interesante Akalia extrañaba el templo de su familia,donde su madre le esperaba con ansias,pero tambien temia por su vida y enfrentar a aquello a lo que conocemos como miedo.
Finalmente decidio seguir con su trayectoria,listo para entrentar a todo lo que se le pusiera en frente. Al dar el primer paso una estela azul acompañada de pequeñas luces del mismo color se alzaron ilumimandon el camino del chico,la estela alumbraba su ruta mientras que las pequeñas luces se aferraban a su cuchillo enfundado.
—Quizas... Este sea mi ultima prueba—Penso en su mente.
Cambiando de evento; algo nuevo seformaba en aquella montaña,un castillo o fortaleza que fue abandonada hace mucho tiempo,era deteriorado por la nieve y consumida por la misma. Estaba al lado de un acaltinado,el cual tenia un puente rojo con una bandera con los tallados de antes,habia unas escaleras que fueron construidas en el acaltinado y que sebian como una opcion de escape. Aquel castillo estaba siendo devorado por algo mas que que la nieve,era un cien pies gigante,como de dos pisos de anto y cuatro de largo,estaba echo de piedras puntiagudas y parecia tener mas de un par de ojos. Cuando derribo aquel castillo obstaculizo el camino para obligar a cualquiera a pasar por las escaleras del acaltinado.
© Osvaldo Nuñez Lopez,
книга «Voces silenciosas».
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